Una de las mayores aspiraciones actuales de la ciudadanía portuense está muy cerca de verse al fin cumplida, según se indica en un amplio informe de la Alcaldía difundido el sábado. La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Puerto de la Cruz acordó el viernes, a iniciativa de una providencia de la alcaldesa Lola Padrón (PSOE), proceder al rescate parcial de la concesión a la empresa Ródano-Tenerife de los dos bares-cafetería sitos en la playa de Martiánez, con el fin de proceder a su derribo para el reacondicionamiento de este espacio del litoral portuense.
Los dos bares construidos en Martiánez a mediados de la década de los noventa del siglo pasado, en sustitución del legendario Bar Columbus, provocaron desde un primer momento una gran controversia en el municipio por su dudosa estética y, sobre todo, por el estrechamiento que provocaron en la avenida de Colón y por impedir la visión del mar desde esta vía.
El actual grupo de gobierno se ha marcado entre sus objetivos la rehabilitación integral del sector de Martiánez, el área turística más antigua de la ciudad, para lo cual estudia la creación de un consorcio que aglutine a las administraciones públicas y a las entidades privadas. Una de las actuaciones más prioritarias en este sector es el derribo de las impopulares edificaciones de la playa, conocidas como las ‘gañanías’. La alcaldesa Lola Padrón destaca que la demolición “posibilitará recuperar un espacio diáfano, amplio y abierto al mar para disfrute de vecinos y visitantes y para restaurar la mejor imagen y el encanto de Martiánez”.
En concreto, la providencia dictada por la alcaldesa destaca el interés público de este rescate parcial “que radica en que este Ayuntamiento considera preciso acometer la demolición de las aludidas edificaciones, siguiendo las directrices de eliminación de construcciones en el dominio público marítimo-terrestre, que ha venido marcando el Ministerio de Medio Ambiente a través de la Dirección General de Costas en el litoral de la isla de Tenerife, y atendiendo además, a la demanda de gran parte de la ciudadanía”.
En la misma providencia Lola Padrón ordena que se redacte el oportuno proyecto de demolición y construcción, que se recabe la preceptiva autorización de la Dirección General de Costas y que se inicie lo antes posible el expediente de contratación de las obras.
Los dos bares-cafetería de Martiánez son explotados por Ródano-Tenerife, desde que en marzo de 2006 se adjudicó a esta empresa los servicios de restauración de la empresa municipal Pamarsa. De conformidad con lo que dispone el Reglamento de Servicios de las Corporaciones Locales y en el pliego de condiciones económico-administrativas que rige el contrato, y teniendo en cuenta la concurrencia del interés público, el Ayuntamiento tiene la potestad de rescatar la concesión antes de su vencimiento con una indemnización para el concesionario, a quien además se reducirá en un 5’8% el canon que tiene que pagar por el resto de unidades de explotación (el Bar Dinámico, los bares y restaurantes de Playa Jardín y el bar-terraza del Parque Taoro). El abandono de los inmuebles rescatados debe realizarse en el plazo de tres meses a partir de la notificación.
La alcaldesa Lola Padrón dictó la providencia el 18 de febrero pasado después de una visita realizada a la playa de Martiánez con el jefe de la Demarcación de Costas de Tenerife, Carlos González, quien expresó de manera verbal a la mandataria local el visto bueno de su departamento al derribo de los dos bares-cafetería. Esta actuación será complementaria del proyecto de regeneración de la playa de Martiánez que ha aprobado el Gobierno Central y que se encuentra en el trámite de información de impacto ambiental. Dicho proyecto, de 5 millones de euros de presupuesto, comprende básicamente la construcción de una nueva escollera semisumergida y la aportación de arena. El jefe de la Demarcación de Costas de Tenerife anunció además a la alcaldesa que el Ministerio se encargará también del proyecto de rehabilitación de la zona terrestre de la playa de Martiánez.
