Con motivo del Día Mundial de la Libertad de Prensa (3 de mayo), proclamado en 1993 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, la Asociación de Periodistas de Tenerife (APT) reitera que se trata de una oportunidad para recordar el derecho a la libertad de expresión, respetarla y defenderla, y rendir homenaje a los periodistas que han perdido la vida en el cumplimiento de su deber.
Este año, el Día Mundial de la Libertad de Prensa está dedicado a la importancia del periodismo y la libertad de expresión en el contexto de la actual crisis medioambiental en todo el mundo, según indica en un comunicado el órgano colegiado de los periodistas tinerfeños. La concienciación sobre todos los aspectos de las distintas crisis medioambientales y sus efectos es esencial para construir sociedades democráticas, en tanto que la labor periodística desempeña un papel fundamental para responder a esta crisis.
La libertad de expresión no se trata solamente de un derecho humano fundamental: es la esencia que posibilita sociedades saludables y dinámicas. Sin libertad de expresión, no podemos hacer frente a las injusticias, generar el cambio o participar en los debates que nos convierten en fundamentalmente humanos. No podemos exigir responsabilidades a los que ostentan el poder. Sin
libertad de expresión, que a su vez propicia todos nuestros otros derechos, nuestra libertad quedará seriamente limitada.
La desinformación y la información falsa sobre cuestiones medioambientales, algunas de ellas muy visibles en Canarias, también significan una amenaza al debate público informado. Por ello, la UNESCO ha publicitado las directrices para la gobernanza de las plataformas digitales con el fin de fomentar la libertad expresión y de abordar la inundación de desinformación en el ecosistema digital.
En el informe se indica que los periodistas se enfrentan a grandes desafíos a la hora de buscar y difundir información sobre temas de actualidad, como los problemas de las cadenas de suministro, la migración climática, las industrias de extracción, la minería ilegal, la contaminación marítimo-terrestre, la caza furtiva, el tráfico de animales, la deforestación o el cambio climático.
Garantizar la visibilidad de estas cuestiones es crucial para promover la paz y los valores democráticos en todo el mundo.
En el contexto de la triple crisis planetaria mundial -cambio climático, pérdida de biodiversidad y contaminación atmosférica-, las campañas de información errónea y de desinformación ponen en tela de juicio los conocimientos y los métodos de investigación científica. Los ataques a lavalidez de la ciencia suponen una grave amenaza para el debate público plural e bien informado. De hecho, la información errónea y falsa sobre el cambio climático puede, en algunos casos, socavar los esfuerzos internacionales para abordarlos.
La desinformación y la información errónea sobre cuestiones medioambientales pueden provocar una falta de apoyo público y político a la acción por el clima, a políticas eficaces y a la protección de las comunidades vulnerables afectadas por el cambio climático, así como de las mujeres y las niñas, ya que el cambio climático tiende a exacerbar las desigualdades existentes.
Para lograr un desarrollo sostenible, los periodistas deben transmitir información precisa, oportuna y exhaustiva sobre los problemas medioambientales y sus consecuencias, así como sobre las posibles soluciones.
En este Día Mundial de la Libertad de Prensa, celebremos, estimulemos y reconozcamos el trabajo de los periodistas en la lucha colectiva por la salud de nuestro planeta y una vida digna para todos.