"La puerta de los hombres"
Hadas y deidades andan sueltos por los campos. Fecundidad y renovación en la mágia de las brasas que ahuman el cielo en la noche más corta del año.
"La puerta de los hombres" que así la denominaban los helenos y que correspondía al solsticio de verano. A partir de ahí, el día comienza a declinar, haciendo que el poder de las tinieblas tenga su reinado más corto. Se abren las invisibles puertas del otro lado del espejo, descubriéndonos el conocimiento del futuro y las dimensiones mágicas de la realidad. Noche de San Juan, comienzo y fin de todo.