Los familiares de los pescadores desaparecidos en el Mencey Taoro II reclaman a las autoridades que retomen el caso, ante la aparición de la embarcación en el mar de los Zargazos, a 2.000 millas náuticas de las Islas Canarias, según informaciones divulgadas por el capitán de la Marina de Tenerife, Antonio Padrón, el pasado sábado. El pasado día 22 de los corrientes, domingo, se cumplió el primer aniversario de la desaparición de los tres marinos residentes en el Puerto de la Cruz, Antonio de la Coba, Agrícola Pedro Santos y Luis González Avellaneda, y con tal motivo se le rindió un sentido homenaje en el muelle pesquero, organizado por familiares y amigos, que consistió en una ofrenda floral y la lectura de poemas a cargo de una hija de Luis González Avellaneda.
De acuerdo con la información facilitada por el capital de la Marina de Tenerife, Antonio Padrón, un carguero con bandera de las Islas Caimán encontró el barco Mencey Taoro II a 2.000 millas náuticas de las Islas Canarias, en el mar de los Zargazos. La tripulación lo izó con una grúa a bordo donde encontraron un chaleco salvavidas, encontrándose documentación del patrón Antonio de la Coba y de su padre (fallecido). El buque que recorrió la embarcación lleva por nombre Ice Runner (Corredor Helado).
El carguero dio una batida alrededor del lugar donde encontró al Mencey Taoro II, para ver si había un objeto flotando, pero sin resultado alguno. En una información transmitida por fax a los familiares en Valencia y en el Puerto de la Cruz, se indica que el citado carguero arribará sobre las seis de la mañana al puerto de Tarragona, el 5 de agosto.
Por otro lado, las familias de los tres pescadores desaparecidos se reunieron el pasado sábado con la alcaldesa, Dolores Padrón, en el salón de plenos del ayuntamiento, para tratar la nueva situación, y ayer volvieron a reunirse, a tenor de las informaciones publicadas en la Prensa, para desmentir algunos aspectos que consideran inexactos.
Las familias desmienten categóricamente algunas informaciones que apuntaban a que la embarcación fuera localizada e izada por un barco pesquero, sino que fue un carguero de bandera de las Islas Caimán, y no de bandera española ni panameña. Es de matrícula registrada en Islas Caimán. La embarcación fue hallada a 2.000 millas y no 1.000 de las Islas Canarias, concretamente en el mar de los Zargazos. Contradicen también que se tratara de un bote auxiliar, sino del propio barco Mencey Taoro II, con cinco chalecos salvavidas, y no uno ni dos. Sólo apareció la documentación de Antonio de la Coba, ni hubo que registrar hallazgo de restos. El Mencey Taoro es transportado en el carguero hacia el puerto de Tarragona a bordo, y no remolcado, como se ha indicado.Indican que “se trata de la única información oficial que tenemos en nuestro poder y todo lo demás son conjeturas, elucubraciones sin más sentido alguno y lo único que persiguen es dañar a los familiares. Llevamos un año escuchando hipótesis, comentarios infundados; muchos de ellos muy dañinos a cerca de la honestidad e integridad personal de nuestros familiares desaparecidos”.29 julio 2007
Los familiares de los tripulantes del Mencey Taoro desaparecidos hace un año reclaman a las autoridades que retomen la investigación
Los familiares de los pescadores desaparecidos en el Mencey Taoro II reclaman a las autoridades que retomen el caso, ante la aparición de la embarcación en el mar de los Zargazos, a 2.000 millas náuticas de las Islas Canarias, según informaciones divulgadas por el capitán de la Marina de Tenerife, Antonio Padrón, el pasado sábado. El pasado día 22 de los corrientes, domingo, se cumplió el primer aniversario de la desaparición de los tres marinos residentes en el Puerto de la Cruz, Antonio de la Coba, Agrícola Pedro Santos y Luis González Avellaneda, y con tal motivo se le rindió un sentido homenaje en el muelle pesquero, organizado por familiares y amigos, que consistió en una ofrenda floral y la lectura de poemas a cargo de una hija de Luis González Avellaneda.
De acuerdo con la información facilitada por el capital de la Marina de Tenerife, Antonio Padrón, un carguero con bandera de las Islas Caimán encontró el barco Mencey Taoro II a 2.000 millas náuticas de las Islas Canarias, en el mar de los Zargazos. La tripulación lo izó con una grúa a bordo donde encontraron un chaleco salvavidas, encontrándose documentación del patrón Antonio de la Coba y de su padre (fallecido). El buque que recorrió la embarcación lleva por nombre Ice Runner (Corredor Helado).
El carguero dio una batida alrededor del lugar donde encontró al Mencey Taoro II, para ver si había un objeto flotando, pero sin resultado alguno. En una información transmitida por fax a los familiares en Valencia y en el Puerto de la Cruz, se indica que el citado carguero arribará sobre las seis de la mañana al puerto de Tarragona, el 5 de agosto.
Por otro lado, las familias de los tres pescadores desaparecidos se reunieron el pasado sábado con la alcaldesa, Dolores Padrón, en el salón de plenos del ayuntamiento, para tratar la nueva situación, y ayer volvieron a reunirse, a tenor de las informaciones publicadas en la Prensa, para desmentir algunos aspectos que consideran inexactos.
Las familias desmienten categóricamente algunas informaciones que apuntaban a que la embarcación fuera localizada e izada por un barco pesquero, sino que fue un carguero de bandera de las Islas Caimán, y no de bandera española ni panameña. Es de matrícula registrada en Islas Caimán. La embarcación fue hallada a 2.000 millas y no 1.000 de las Islas Canarias, concretamente en el mar de los Zargazos. Contradicen también que se tratara de un bote auxiliar, sino del propio barco Mencey Taoro II, con cinco chalecos salvavidas, y no uno ni dos. Sólo apareció la documentación de Antonio de la Coba, ni hubo que registrar hallazgo de restos. El Mencey Taoro es transportado en el carguero hacia el puerto de Tarragona a bordo, y no remolcado, como se ha indicado.Indican que “se trata de la única información oficial que tenemos en nuestro poder y todo lo demás son conjeturas, elucubraciones sin más sentido alguno y lo único que persiguen es dañar a los familiares. Llevamos un año escuchando hipótesis, comentarios infundados; muchos de ellos muy dañinos a cerca de la honestidad e integridad personal de nuestros familiares desaparecidos”.
